Nuestro parlamentario Jaime Mulet Martínez presentó este martes un proyecto de ley que deroga el artículo 114 de la Ley del Tránsito, que sanciona con una elevada multa a quienes no usan el dispositivo tag o quienes tienen el dispositivo vencido. En la instancia, el parlamentario estuvo acompañado por los diputados Cosme Mellado y Hernán Palma, además de la directiva del movimiento No Más Tag, quienes anunciaron una nueva protesta que se llevará a cabo este viernes 20 de octubre.

“A nuestro juicio, estas multas son muy gravosas respecto a los usuarios de las autopistas urbanas concesionadas”, dijo el parlamentario, añadiendo que “queremos y buscamos la derogación de este artículo, precisamente porque es un elemento punitivo que le coloca el Estado de Chile al servicio de empresas privadas concesionadas de manera muy irracional y anormal”.

El legislador por Atacama denunció: “Las empresas concesionarias y, particularmente las de las zonas urbanas, no están entregando un servicio satisfactorio y son extremadamente elevados sus peajes. Hay estudios que se invocan en el proyecto de ley y que señalan las altas rentabilidades que han tenido durante décadas las concesionarias”, agregando que “da la impresión de que el Estado subvaloró algunas cosas, que las empresas se benefician en demasía y que entregan un servicio de muy mala calidad; eso ha quedado en evidencia, por ejemplo, con lo que pasó en la autopista Vespucio Oriente hace algunas semanas, donde la filtración estaba provocando, no solo un riesgo, sino que obviamente una mala calidad en el servicio”, acotó Mulet.

El diputado expresó que el proyecto de ley que ya fue presentado en la comisión de Obras Públicas de la Cámara apunta a la demanda de los miles de usuarios del transporte privado de la Región Metropolitana, particularmente donde hay instaladas televias urbanas. Esto, en un contexto en que las concesionarias tienen ventajas desmedidas, en desmedro del servicio entregado, lo que fue catalogado de “abusivo” por Mulet.

Por su parte, Andrés Alarcón, vocero nacional del movimiento No Más Tag, dijo: “Estamos acá como movimiento No Más Tag apoyando este proyecto sobre la derogación y eliminación del artículo 114 de la Ley de Tránsito 18.290, lo que para nosotros es esencial, porque este artículo faculta a la concesionaria a cursar una multa a toda persona que deba su boleta y transite nuevamente por la autopista con una multa de una UTM, privándolo de sacar su permiso de circulación”.

Además, el vocero del movimiento agregó que “en estos más de 20 años de concesiones de autopistas, han ganado más de 15 veces sus utilidades. Muchas no cuentan con carretera y menos con berma; en casos de seguridad, tenemos ocasionalmente encerronas y muchos robos dentro de las autopistas, donde ellos no se hacen cargo”.

Sobre esto, Jaime Mulet denunció que “en este país hay gente que defiende absolutamente las concesiones. Esto es una discusión antigua, no es un proyecto fácil, porque nos enfrentamos a grupos económicos que están detrás y que de alguna manera defienden una relación entre el Estado y las concesionarias”.

Cosme Mellado, parlamentario presidente de la Comisión de Obras Públicas, Transportes y Telecomunicaciones de la Cámara, dijo: “Esperamos que esta iniciativa avance y ojalá podamos tener la opinión de la comunidad, porque esta situación no afecta solo a los santiaguinos, sino que también a todo aquel que viaja hacia la capital”. Agregó, además, que “somos el país con más peajes y mayor cantidad de impuestos por transitar en las vías y no con la seguridad que deberían entregar las concesionarias. Quiero felicitar al diputado Mulet, creo que apunta a ese desafío que tenemos como país de hacer mayor justicia social, especialmente para aquellos que lo están pasando mal”.

En ese contexto, el diputado independiente, Hernán Palma, acotó: “Quiero hacer hincapié en el impacto medioambiental que tiene no poder acceder a las autopistas licitadas, sabemos del atochamiento, donde además se afecta a la salud mental de las personas”, quien agregó que “esto tiene un doble impacto: efectos ambientales y mentales en una población que se ha visto mermada, ya que los ciudadanos se pasan horas y horas en los tacos”, cerró el doctor Palma.