Según informó la presidenta de la Comisión de Agricultura, diputada Alejandra Sepúlveda, representantes de viñateros explicaron que por un decreto del año 2013 está permitido que los productores chilenos de vino le agreguen hasta un 7% de agua, situación que hoy no estaría siendo fiscalizada y que podría perjudicar la reputación en el extranjero.
Desesperados se encuentran los viñateros de los valles de Itata, Colchahua, Maipo y el Maule. Así lo expresaron esta semana en la Comisión de Agricultura, ya que según explicaron hace más de 11 años que comenzó la crisis de la uva con la caída de su precio, transformándose en una pesadilla para los más de 17 mil pequeños agricultores que producen el 70% de este producto en Chile.
En la instancia, la presidenta de la Coalición de Viñateros, Jenny Llanos, denunció que existen tres grandes empresas vinícolas que están manejando el mercado y que éstas recurren a malas prácticas que no son fiscalizadas.
La vocera informó que un decreto del año 2013 modificó los alcances de la Ley 18.455, para autorizar el uso de agua en hasta un 7% en el vino comercializado, presencia que se justifica en un 5% por lavados de equipos y en el 2 % restante por la disolución de productos enológicos.
Según los viñateros, la medida no se justificaría ya que al producir vino no necesitan agua, menos en los orgánicos, y que nunca se lavan los equipos en tiempo de fermentación. Además, agregan que el único equipo que fiscaliza el porcentaje de agua en los vinos lo tiene el SAG y que nunca se ha utilizado desde su compra.
Al respecto, la presidenta de la Comisión de Agricultura, diputada Alejandra Sepúlveda (FRVS), comunicó que están solicitando a Odepa datos sobre la oportunidad y claridad de las cifras que entregan en sus informes, “para que los agricultores puedan tomar buenas decisiones en términos de producir, de cosechar, etc.”. Asimismo, indicó que también se solicitó a Indap la información completa sobre las inversiones que ha realizado esta institución en pos de la pequeña agricultura y que se le ofició al Ministro de Agricultura, José Antonio Walker, “para que tome las acciones necesarias de apoyo a los pequeños viñateros y lo citamos para que pueda venir a la Comisión de Agricultura en el mes de marzo”.
Dada la gravedad de esta situación para el prestigio de nuestros vinos, la parlamentaria adelantó que buscaran impulsar una legislación especial sobre etiquetado del vino, tal como el que se hizo para la leche y que hoy está ad portas de ser despachado a ley.
“Yo creo que aquí tenemos una complicación muy grave respecto del agua que se incorpora al vino, que es alrededor del 7% según decreto, no por ley, y lo que queremos hacer es algo parecido a lo que hicimos con la leche, de poder incorporar una legislación especial para primero definir qué es lo que significa esto de incorporar agua, pero al mismo tiempo que se produzca la fiscalización de parte del SAG que es tan necesaria y que lamentablemente al parecer no se ha realizado”, concluyó.