Amante de la vida al aire libre y el contacto con la naturaleza, le encanta pasear y disfrutar a este veterinario de profesión. También le gusta el cine y la música, en especial la música brasileña, el jazz y el rock de grupos chilenos, especialmente con contenido social y étnico. Nacido en Rancagua, ciudad donde vivió en su niñez y adolescencia. Más tarde emigró a Valdivia para estudiar medicina veterinaria en la Universidad Austral de Valdivia, opción ganadora, ya que estaba indeciso entre su vocación social y la relacionada con el ámbito productivo y de salud. Se quedó con esta última y decidió, además, quedarse en la ciudad considerada en la época colonial «la llave del mar del Sur». Allí formó su familia, compuesta por su esposa, tres hijos -una periodista, un ingeniero agrónomo y el tercero en la universidad- una perrita y doce gatos.

¿Cuéntame un poco cuáles han sido tus trabajos más significativos? 

En lo profesional me he desempeñado en organismos no gubernamentales, ONG del ámbito rural y sindical, como también en la institucionalidad pública trabajado en INDAP, corporaciones y consultoras. Siendo muy especial mi paso por INDAP por mi vínculo con el mundo rural, gran parte de mi tiempo he trabajado con campesinos y campesinas, como también con comunidades indígenas. También fui SEREMI de Bienes Nacionales, colaborando desde la política pública. Actualmente trabajo en la Municipalidad de Valdivia.

¿En qué consiste tu labor en la Municipalidad de Valdivia?

Estoy trabajando donde partí, con un programa de descentralización que consiste en acercar el municipio a los sectores rurales y a aquellos sectores donde no siempre llega la institucionalidad pública. Hoy día estoy como director de la nueva Dirección de Gestión de Riesgo de Desastres que se aboca principalmente a identificar los principales riesgos que tenemos en la comuna, así como trabajar con la comunidad para poder mejorar las capacidades de prevención ante algún riesgo o amenaza.  

¿Cómo llegaste a la Federación Regionalista Verde?

Llegué porque principalmente soy un militante de izquierda, me siento cercano a los temas ambientales y sociales, y porque, además, entre sus principios está el tema del regionalismo, mirado desde la descentralización. Es cómo hacer política desde lo local, yo creo que es lo que me acercó, sin duda, al partido. Me he declarado ecosocialista, siendo parte de los años 80 de las luchas sociales y desde los 90 en las ambientales. 

En tu labor como coordinador regional de la FREVS Los Ríos ¿cuál ha sido tu principal sello?

Principalmente he estado trabajando para acercar las distintas sensibilidades de compañeros y compañeras que tengan alguna vinculación con este proyecto para acercarlos e ir avanzando paso a paso en tener un partido consolidado en la región. Tengo la vocería del partido en la región y también la representación ante los otros partidos políticos y la delegación presidencial. 

¿Cuáles son los principales desafíos que tiene tu mandato por delante? 

Los principales desafíos como región están en la línea de que somos una región verde, por todo lo que significa la gran presencia de bosque nativo, humedales y ríos. Por otro lado, también está todo ese mundo que está ubicado en los sectores rurales, que tienen sueños, que tienen ganas de tener más acceso a la tecnología, a los servicios, y en especial, en lo que se refiere a la soberanía alimentaria. Cómo podemos acercar los productos campesinos al mundo urbano, cómo se pueden compatibilizar la producción tradicional con los requerimientos de ciertos estándares productivos. 

¿Tus proyecciones?

Seguir aportando desde lo técnico y lo político en el quehacer local y regional, y fortalecer los liderazgos internos de los regionalistas verdes para potenciar nuestra presencia en los territorios rurales y urbanos.