Una muy buena noticia para los defensores del medio ambiente de la comuna de Penco, en la región del Biobío, fue el anuncio esta semana de la paralización del procedimiento de evaluación de impacto ambiental del proyecto «Proyecto Módulo Penco» encabezado por la empresa minera Aclara. Las organizaciones ambientales, de las cuales forma parte nuestro concejal FREVS Leonardo Jara -activista ambiental por más de diez años- celebran este triunfo, aunque permanecen en alerta ante otras iniciativas similares.

¿Qué significa para las organizaciones ambientales y la comunidad en general, el término de este proyecto cuyo fin es extraer “tierras raras” en la comuna?
Para nosotros y nosotras es un día de alegría, pero al mismo tiempo el fiel reflejo de las denuncias que hemos estado haciendo durante muchos años. Esta es una lucha que lleva más de diez años en los territorios, ya sea contra GNL Penco o en Talcahuano contra las líneas de alta tensión. No estamos dispuestos a que nuestros territorios se conviertan en una mal llamada “zona de sacrificio”. Estamos contentos, pero al mismo tiempo atentos y no bajamos los brazos ante la inminente amenaza de otros proyectos que se pretenden reinstalar y modificar el modo de vida de nuestros territorios.

Este triunfo es de la comunidad organizada, donde prima un fuerte sentido de pertenencia
Hay que dejar claro que esto se ganó con el esfuerzo transversal de muchos actores, a nivel político, pero sobre todo de la ciudadanía, aquí se realizó un plebiscito, una consulta ciudadana, donde el 99% dijo NO a la minera. Dentro de ellos hubo también mesas ciudadanas y mesas de niños, niñas y adolescentes, organizadas por los mismos ciudadanos, ya sea militantes o no de algún partido político, de derecha o de izquierda. Aquí hay un sentido de pertenencia con el territorio, esto es transversal, estuvo toda la comunidad de Penco y todos quienes tienen un sentido de identidad con el territorio y también con la comuna, hijos o nietos que ya no están en Penco pero si están en otras regiones trabajando o en otros países, pero mantienen una identidad y un patrimonio en nuestra comuna.

¿Cómo ves la importancia de la alianza entre el mundo político y la comunidad organizada en función de defender el territorio?
La importancia es que el activismo ambiental cruce la vereda y que también tengamos injerencia en las políticas. El activismo ambiental, así como en otros países, debe tomar protagonismo, debido a la contingencia ambiental que estamos pasando por el cambio climático. Es necesario que ya no esperemos a que las políticas se realicen por -a lo mejor malos políticos- sino que también tenemos que asumir un rol en la sociedad como políticos. Hay que hacer también un llamado o a que no nos separemos del mundo político. Existen malos políticos, pero la política en sí es buena y la mayor parte de las que se realizan en los territorios son buenas políticas, conscientes y respetuosas con el medio ambiente.

¿Por qué crees que hubo tanta oposición al proyecto de la minera Aclara cuando en muchos casos la promesa de trabajo es bien requerido por parte de la comunidad?
La minera, al igual que muchos proyectos extractivistas promete un futuro esplendor, trabajo, pero tenemos que dejar en claro las limitaciones y también las consecuencias que esto deja una vez que se van. Ellos pretendían estar 17 años en el territorio, modificando cauces, modificando la topografía de los cerros, y por ende, ellos iban a sacar, extraer y se iban a ir. Es un progreso que no se va a ver directamente en nuestro territorio, por eso es importante que esta falsa promesa de progreso se vea reflejado. ¿Y cómo lo vemos?, lo vemos en comunas como Coronel y en nuestras comunas vecinas, donde se genera mucha electricidad mediante termoeléctricas y donde han dejado las consecuencias.

Y hoy día hay un tema de descarbonización, lo que va a dejar también comunas sin trabajo porque como han sido comunas históricas del carbón en Curanilahue, en Lota, y se han tenido que reconvertir, hasta el día de hoy sufren las consecuencias porque no saben cómo reconvertirse. No saben si son una ciudad patrimonial o turística, les ha costado mucho. Ha costado décadas para que lleguen a tener un progreso estable dentro de una misma comuna, una matriz económica, que también respete el medio ambiente.

¿Crees que es posible en Chile lograr un desarrollo sostenible que no siga deteriorando el medio ambiente?
Yo creo que tenemos que estar a la altura del progreso que se ve en otros países, tenemos que aumentar los estándares establecidos y organizar dónde se pueden hacer estas actividades, por ejemplo, minería. No podemos sacrificar espacios, no podemos hacer una actividad que tenga un alto impacto dentro de la misma comunidad. Tenemos que ser bien inteligentes en saber dónde es posible hacer esto. Sabemos que son necesarios algunos materiales, también sabemos que tenemos que cambiar la matriz energética y nuestro modelo de transporte público, pero no a costa de comunidades que ya son comunas pobres y al mismo tiempo quedan los impactos en esa misma comuna.

Necesitamos que las empresas entiendan qué son buenos procesos, respetando las normas y que los altos estándares que se han establecido en otros países se repliquen acá. Y no porque en Chile no tengamos altos estándares se pueda pasar por encima de las comunidades. No estamos llanos a recibir ese modelo económico, y el que quiera producir, que sea respetando la decisión de las propias comunidades.

Hoy día el contexto de cambio climático nos obliga a no seguir haciendo las cosas de la misma forma en que se han hecho hasta ahora.
Con respecto al cambio climático, yo creo que en Chile estamos bien lejos de la agenda 2030 de las Naciones Unidas. Yo creo que aquí son bien testarudos en las empresas y en los grandes poderes, las familias económicas, que no entienden que ya no se puede seguir produciendo como era antes. Ya no estamos en temporada de vacas gordas, tenemos que entender las consecuencias del cambio climático, como las lluvias que tuvimos aquí, y por otro lado, las altas temperaturas que se están viendo en el hemisferio norte, temperaturas que han dejado muertes como en las ciudades de México. Hoy hay iniciativas que se están haciendo en otros países, como por ejemplo, pintar el asfalto de color blanco para que no tenga tanta retención térmica y así bajar la sensación térmica, o también, ha ido progresando el reemplazo de pasto por plantas de bajo consumo hídrico, pero que no pierden sus valores ecosistémicos.

Necesitamos de políticos en todos los espacios de toma de decisiones que entiendan lo que es el cambio climático
Yo creo que la política de hoy en día necesita de políticos que tengan una consciencia ecológica y una consciencia también de lo que es la resiliencia y la adaptación, porque sí o sí es inminente y vamos a tener que hacerlo. Tenemos que modificar nuestras conductas, entender que comer sandia todo el año o tomate o palta todo el año no es normal. Nos hace mal a nosotros, a los bolsillos y a la economía. Tenemos que aumentar nuestra cantidad de granos en base a una soberanía alimentaria, pasar de un 10 o 11 por ciento al 40 por ciento de producción de grano que teníamos antes, y no depender de otros países, tener nuestra propia alimentación. El cambio climático es clave para las futuras políticas, para las generaciones presentes y las generaciones venideras