Columna de Opinión de Patricio Neira, Coordinador FREVS.

En los últimos años, Chile ha sido testigo de una creciente conciencia sobre la importancia de proteger el medio ambiente. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos realizados, nuestro país aún enfrenta importantes desafíos en esta materia. Desde la contaminación del aire hasta la escasez de agua, pasando por la deforestación y la degradación de los ecosistemas marinos, las problemáticas medioambientales en Chile requieren de una atención urgente y de acciones concretas por parte de la sociedad y las autoridades.

Frecuentemente, en la temporada invernal evidenciamos un asfixiante desafío relacionado con la contaminación del aire, especialmente en las grandes ciudades. La quema de leña, la emisión de gases tóxicos por industrias y vehículos, y la falta de regulación y fiscalización adecuada son factores que contribuyen a esta grave situación. El smog y el humo se han convertido en una constante, afectando la salud de las personas y aumentando las enfermedades respiratorias. Es necesario implementar medidas más estrictas de control de emisiones, promover el uso de energías limpias y fomentar el transporte público y la movilidad sostenible.

El acceso al agua potable en Chile está en peligro. Nuestro país se ha caracterizado por su escasez hídrica, y esta situación se agrava año tras año. El cambio climático, la sobreexplotación de los recursos hídricos y la falta de una gestión adecuada son factores determinantes. La sequía ha golpeado duramente a diversas regiones, afectando tanto la disponibilidad de agua para el consumo humano como para la agricultura. Es fundamental implementar políticas de manejo responsable del agua, fomentar la reutilización y reciclaje de este recurso, y promover una agricultura más eficiente en el uso del mismo.

También, y muy preocupante, es que estamos perdiendo nuestra riqueza natural. La deforestación es otro desafío medioambiental que enfrentamos en Chile. La expansión de la industria forestal, la tala ilegal y los incendios forestales han devastado vastas extensiones de bosques nativos, poniendo en peligro la diversidad biológica y contribuyendo al cambio climático, por tanto, es urgente fortalecer la protección de nuestros bosques, promover la reforestación y fomentar la utilización sostenible de los recursos forestales.

Por último debemos hacernos cargo de la degradación de los ecosistemas marinos. Nuestro país posee una extensa costa y una rica biodiversidad marina, pero también enfrenta desafíos significativos en la conservación de los ecosistemas marinos. La sobrepesca, la contaminación por desechos plásticos y la destrucción de hábitats son amenazas constantes para la salud de nuestros océanos. Es necesario establecer reservas marinas, regular la pesca de manera sostenible y promover la educación ambiental para generar conciencia sobre la importancia de cuidar nuestros mares.

Con todo, la protección del medio ambiente en Chile debe ser una prioridad tanto para las autoridades como para la sociedad en su conjunto. Es imperativo tomar medidas concretas para abordar las problemáticas medioambientales hoy, para intentar mitigar los daños generados tanto por la acción humana como por el Cambio Climático.