A través de imágenes satelitales de radar y ópticas el Centro de Información de Recursos Naturales, CIREN, dependiente del Ministerio de Agricultura, nuestro ministro Esteban Valenzuela, a cargo de la cartera, trabaja en identificar, cuantificar y caracterizar las zonas afectadas por las inundaciones que dejó el sistema frontal que produjo daños al sector agrícola desde la Región de Valparaíso hasta el Biobío.
Desde las dependencias del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), el jefe de Agricultura dio a conocer las cifras preliminares del territorio afectado según la información satelital. “Es un instrumento muy concreto y eficaz, que es un diagnóstico a la realidad previa a esta torrentada histórica y la situación que existe hoy. La afectación, que ya se ha medido en 4 regiones, de 100 mil hectáreas agrícolas, corresponde a donde creció la olla de los ríos y causó daño directamente (…) Este martes va a estar la información de las regiones Metropolitana y Valparaíso y así vamos a completar las 6 regiones con mayor afectación.”, dijo la autoridad gubernamental.
A estos números se suma el daño ocasionado en los sistemas de riego que requieren la acción de la Comisión Nacional de Riego (CNR). “A estas 100 – 120 mil hectáreas, que serán probablemente las directamente afectadas con los datos de Valparaíso y la Región Metropolitana, se suman otras 180 mil hectáreas aproximadamente que están indirectamente afectadas por el barro, por la falta de agua para riego, que tiene que estar a disposición de la agricultura en el mes de septiembre”, sostuvo la autoridad.
Respecto a la utilidad de la información y cómo se trabajará con ésta, el titular del Agro comentó que “estos datos van a compartirse con INDAP, la Subsecretaría de Agricultura, el SAG, porque es muy importante el catastro de afectación silvoagropecuaria que hemos trabajado con el Ministerio de Economía, que encabeza el ministro Grau, para ser transparente y preciso con los daños y que los recursos públicos se destinen sean bien utilizados”.
Sobre la metodología con la que se obtuvo esta información, que ha significado el trabajo de más de sesenta profesionales, la directora ejecutiva del CIREN, Katherine Araya, indicó que este “visualizador de emergencia agrícola ha permitido a través de imágenes satelitales de radar y también en algunos casos ópticas, poder obtener información certera sobre las zonas afectadas e inundadas desde la Región de Valparaíso hasta Biobío. La metodología que se utilizó fue analizar las cuencas y las cajas de los ríos. Senapred tiene un sistema de apertura del CHARTER, que es un sistema internacional que nos permite que toda la constelación de satélites existentes en el espacio se visualice hacia los territorios afectados, lo que coordina SENAPRED con diferentes servicios, en este caso el MINAGRI”.
En cuanto al sistema que permite recopilar esta información, la ministra de Ciencia, Aisén Etcheverry, relevó la velocidad y precisión con la que se obtiene, así como su utilidad. “El CIREN es parte de la red de institutos tecnológicos públicos donde el Estado hace investigación, y la razón de ello es precisamente lo que vemos hoy: la ciencia y la tecnología nos permiten contar con información mucho más certera, precisa y rápida. Sin los satélites y el trabajo de análisis de estos profesionales nos habríamos demorado varios meses en levantar esta información y visualizarla. Esto hace 10 años no habría sido posible. Nos permite también disponibilizar la información para que quienes están investigando estos temas nos ayuden con recomendaciones de mejores medidas de prevención y políticas públicas asociadas”, resaltó.
Finalmente, la subdirectora de Gestión de Riesgo de Desastres de SENAPRED, Alicia Cebrian, sostuvo que “como SENAPRED coordinamos a una serie de instituciones y organismos para poder activar estas capacidades que cada día toman más relevancia en la gestión de la información. El detalle de ésta es esencial para poder dimensionar el daño, para hacer el levantamiento de los catastros y para tener la información exacta de las personas damnificadas y sus modos de vida afectados por la emergencia”.