Queremos saber un poco más de quién es Jaqueline Cárdenas.

Soy hija de Pancho y Olga, tengo dos hermanas y dos hermanos. Vengo de una familia humilde de mucho esfuerzo, con problemas y dificultades, pero que hemos dado todos lo mejor de nosotros para ser felices, especialmente mi madre y mi padre. Soy madre de dos niños nacidos: Gael y Elián, y tres a los que no pude llegar a conocer porque fueron embarazos inviables y a quienes nunca les di un nombre, más que sentirlos y hablarles. Soy casada con Carlos, mi gran compañero de vida.

¿Qué es lo que más te apasiona hacer?
Me gusta conversar, escuchar, aprender de las personas, de sus historias y experiencias, debatir, me encanta!, aunque algunos crean que es “discutir” jajaja. Me gustaría hacer muchas cosas q están en la lista de los pendientes….
Me gusta la patota, la tribu, el choclón, la talla rápida y tengo mi lado “standapera” con mis círculos íntimos, aunque mi círculo es amplio, soy de hartas amigas y amigos, más la familia. Bueno, comer también me encanta, disfruto trabajar, crear y el hacer, los resultados, los impactos positivos son los que me llenan, a todo nivel!

Nacida y criada en la región del Biobío.

Nací en Concepción y vivo desde los tres años diez meses en Talcahuano. Estudié en la Escuela F-1224 de la Población Los Lobos, barrio en el que crecí y viví una hermosa infancia con todo lo adverso que había. Fui afortunada de tener muchos amigos y amigas, vivir muy en relación con la naturaleza y tener esa infancia en el barrio, de harto juego, barro, con vecinos y vecinas. De muy niña viví la colaboración.
Después cursé mi enseñanza media en el colegio Claudio Matte Pérez A-27 de Talcahuano. Fui parte del Centro de Alumnos en tercero y cuarto medio, después trabajé varios años. Siempre digo que mi corazón “chorero” atrae cosas y así fue como la Universidad San Sebastián abrió una sede con becas en Talcahuano para los egresados de colegio municipal.
Ahí pude estudiar lo que siempre quise ser, en realidad siempre lo fui, pero ahora necesitaba el título: trabajadora social. Eso soy de profesión, pero también vivo el trabajo social.

MILITANCIA Y POLÍTICA

¿Cómo te iniciaste en la política?
Yo había militado solo en un partido: el MAS, fue una difícil decisión militar. Nunca antes quise aceptar invitaciones del PS o en mi juventud, del PC. Cuando se terminó ese proyecto político (eso da para otra historia), con compañeros y compañeras con quienes éramos parte, conversamos respecto a qué haríamos y Rodrigo Venegas nos envía la información de la FREVS, además de una previa conversación con Esteban Valenzuela, actual ministro.
Nos contactamos con Jaime Mulet, actual diputado, y en la misma semana nos reunimos a conversar. Fue en aquella reunión donde nos propusimos inscribir la FREVS, bien valientes, ya que veníamos de procesos complejos y de haber inscrito hace poco al MAS. Llegamos porque nos conquistaron sus principios y nos hizo total sentido, lo que se afianzó aún más cuando Marta Molina, secretaria de la época, visitó la región. Leo Gutiérrez era el coordinador en ese tiempo y fue quien encabezó este camino desde la región Y así le dimos al proceso con mucho cariño y convicción de que la FREVS llegara a Biobío.
Actualmente trabajo en la Delegación Presidencial del Biobío.

¿Cuáles son los principales desafíos de la FREVS a nivel regional?
Tenemos desafíos, principalmente en la estructura, fortalecimiento y crecimiento del partido. No podría hablar de un sello como solo “mío”, pero la idea es hacer siempre política de manera horizontal, ordenada y que todas y todos los militantes estén informados de lo que ocurre en su partido, sentirse parte no sólo cuando se necesitan manos para una campaña, potenciar cuadros políticos nuevos desde el territorio.

Tu experiencia como presidenta regional de la FREVS
Llevo un año de presidenta, ha sido intenso porque nos hemos enfrentado a desafío electorales importantes y también muy seguidos, pero permanece el apoyo de mis compañeras y compañeros en los desafíos y diseños ya trazados conjuntamente.
En la región hay un desafío respecto a la percepción, o más bien dicho instalación, que ya es positiva. Bueno, la campaña de consejeros constituyentes donde nuestro candidato Cristian Cartes obtuvo 38.100 votos, sin el apoyo de ningún parlamentario/a ni de ningún otro partido, fue porque la ciudadanía votó por este proyecto regionalista, verde y social. Y eso nos llena de más convicción y compromiso, pero también de mayor trabajo para responder y llegar a más personas.
En cuanto a las relaciones con otros partidos, siempre hemos ejercido un rol de unidad y de diálogo político, de ideas que permitan que la región se fortalezca.

¿Podríamos hablar de un perfil de la militancia en el Biobío?
Nuestros militantes vienen del mundo social. La participación ciudadana ha sido nuestro gran sello y hoy el crecimiento en lo verde, sin duda, es importante y nos hace sentido. Nuestro concejal de Penco, Leonardo Jara, por ejemplo, es un luchador social, es un luchador medio ambientalista y nos ha nutrido. Esperamos que así muchas más personas vean en este espacio uno de construcción y aporte al territorio, a la región, al país, donde las personas puedan vivir mejor.
Hay desafíos que tienen que ver con poder llevar gobiernos territoriales con un sello descentralizado, basado en la participación ciudadana, preocupados y ocupados del desarrollo sostenible y sustentable, donde la personas sean el centro.

¿Cuáles son los principales conflictos regionales a nivel social y ambiental?
El terminar con zonas de sacrificios que existen en la región y proteger que otras se conviertan en ellas, como es nuestra preocupación por la comuna de Penco y el proyecto de la Minera Aclara.
La conectividad de la región es una problemática, tenemos dos islas en la región con graves problemas, entre ellos, la conectividad con el continente. Tenemos que ser capaces de llegar a todos los rincones de nuestra diversa región.
Se hace aún más importante ser parte de los desafíos de una región golpeada por los incendios, que dejó al descubiertos temas importantes que se deben abordar con pertinencia territorial y por sobre todo, recuperar y cuidar la pequeña agricultura familiar campesina.

Las y los regionalistas verdes llegamos para quedarnos!