“Más de 21 mil millones de pesos gastados en un proceso donde no se conoce el error muestral”, aseguraron los parlamentarios, ambos integrantes de la comisión de Agricultura, quienes realizaron hoy la presentación a la Contraloría pide que pide auditar todo el proceso y establecer responsabilidades.
Los senadores Alejandra Sepúlveda (FRVS) e Iván Flores (DC), ingresaron hoy viernes a la Contraloría General de la República una petición formal para que se ordene una auditoría a raíz del “fracaso del Censo Agropecuario realizado durante el Gobierno del ex presidente Piñera”. La presentación, entregada al Contralor Jorge Bermúdez, señala las deficiencias del proceso, considerando un gasto fiscal superior a los 21 mil millones de pesos.
Según explicó la senadora e integrante de la Comisión de Agricultura, Alejandra Sepúlveda (FRVS), «se han hecho 8 censos agropecuarios desde 1930, el último fue de 2007, por eso este último censo era muy esperado, y encontrarnos con este descalabro es muy grave, pues a partir de estos censos agropecuarios y forestales sabemos cuál es la realidad del país en términos productivos, en términos de hectáreas ociosas, en términos de cuáles son los rubros que han ido mejorando o que han ido disminuyendo, etc. y sobre todo el contexto de seguridad alimentaria, y nos permiten realizar políticas públicas que en este caso dado los datos fallidos, no se podrá».
Al respecto, el senador Iván Flores (DC), también integrante de la Comisión de Agricultura, recalcó que “el daño es enorme, y no solo por los millonarios recursos involucrados, con un resultado inservible, sino porque no tendremos la información necesaria para conocer en qué situación está el mundo rural, y seguimos con los datos del censo del 2007, porque este, no sirvió para nada, es un fracaso”.
“Queremos que este fiasco nacional no se quede sumergido entre los papeles del archivo, queremos que aquí haya responsables, que la Contraloría identifique si esta falla gigantesca y este ridículo nacional que nuevamente se hace a través de un proceso censal, se esclarezca si hubo negligencia, dolo, incapacidad o que es lo que hubo. Lo que ya sabemos, fueron 21 mil millones de pesos botados a la basura, y puede que haya datos que alguien trate de hacer valer, pero un censo es diferente, es una radiografía que se toma en simultaneo en todo el territorio nacional».
En este sentido, la senadora Sepúlveda, fue más allá y agregó que «quienes son responsables de esto es el INE. El INE ha sido invitado ya dos veces a la Comisión de Agricultura y no ha asistido a dar una explicación de lo que está ocurriendo hoy día. Se gastaron 21 mil millones de pesos, lo que sin duda es un recurso sustancial para el Ministerio, pero también para el país y es por eso que hemos venido hoy día a ver al Contralor para que se pueda hacer una auditoría completa de lo que ocurrió en este proceso, desde el minuto en que se hizo las bases para poder saber cuáles son las atribuciones de ODEPA y cuáles son las atribuciones del INE, pero nos preocupa porque ya no es el primer censo fallido, recordar lo que nos pasó en el censo poblacional. No es el primer censo en el cual tenemos complicaciones con el INE, así es que queremos que la Contraloría revise absolutamente el proceso, los recursos que se utilizaron y, además, el procedimiento de análisis».
Consultada por cómo esperan que se realice esta consulta, señaló que debiera ser por «un grupo de expertos internacionales y nacionales que pueda chequear las cifras y vea cómo se puede complementar lo que ya está hecho, o si se tuviera que hacer un censo en aquellas regiones donde tuvimos los menores logros, los cuales lamentablemente, fueron en la zona central del país, donde existe mayor agricultura, donde tenemos agricultura de exportación y donde se produce la mayor cantidad de alimentos. Entonces, justamente en la macrozona central es donde tenemos las mayores complicaciones, incluso hasta un 28% de desajuste».
Finalmente, Flores indicó que “estamos en el peor de los mundos y aquí alguien tiene que responder. No solo el censo general del primer gobierno de Piñera fue un fracaso, ahora en su segundo gobierno nos deja otro censo fracasado, el agropecuario”.