El pasado viernes 5 de noviembre se llevó a cabo el Quinto Encuentro de Mujeres Regionalistas en Copiapó, evento que contó con la participación de la candidata a Senadora por la Región de Antofagasta, Marta Molina, y la Delegada Política de la FREVS, Flavia Torrealba.

La instancia contó con una alta participación de mujeres que participan de diversos espacios políticos, como lo son las juntas de vecinos, los clubes deportivos, partidos y movimientos políticos, sindicatos, entre otros.

Para iniciar este encuentro la candidata a Senadora y Secretaria General de la FREVS, Marta Molina, planteó la situación de la participación de las mujeres en la política de hoy, presentando los diversos desafíos que aún existen, como la invisibilización de demandas, la discriminación y la invalidación del género en un área que aún es dominada por hombres y que aún no se desarrolla de manera igualitaria.

Muchas mujeres compartieron sus testimonios y participaron activamente de la instancia. Sobre esto, Marta Molina declaró: “como mujeres hemos sufrido las consecuencias de la desigualdad y por eso tenemos que apoyarnos, que nadie nos diga que nuestra lucha no vale, que nadie desmerezca nuestras luchas, son todas importantes para cambiar la calidad de vida de nuestros entornos».

A esto la candidata a Senadora por la Región de Antofagasta, agregó: “Hoy nos hemos empoderado de esos espacios, damos la pelea para representar a las mujeres y tenemos que conseguir la paridad, no podemos estar en desigualdad de condiciones”.

Posteriormente, la Delegada Política de la FREVS, Flavia Torrealba, hizo un recorrido sobre la historia de las mujeres en la política, haciendo énfasis en cómo no han sido nombradas como parte de procesos históricos, por ejemplo, en la conformación de la República y en las primeras luchas de las mujeres para instaurar el voto femenino.

Flavia Torrealba también destacó el recorrido histórico de las constituciones en Chile y su papel beneficiando gobiernos conformados exclusivamente por hombres y la influencia de la iglesia en la conformación del rol de la mujer.

Finalmente, recalcó la relevancia de participar de los procesos eleccionarios y de resignificar la historia de las mujeres, a lo que agregó: “La historia no se puede escribir sin la mano nuestra».